EL SECRETO

"El lugar más importante de un adorador"
"Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. Mateo 6:6
Jesucristo hablo del secreto en varias ocasiones: Primero, a la hora de dar ofrendas. Segundo, a la hora de orar. Tercero, a la hora de ayunar. En las tres ocasiones dijo: "tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará...". Nos ha tocado vivir en medio de una mundo diferente al que nuestros hermanos en la Biblia vivieron. La tecnología ha cambiado mucho la forma como realizamos culto a Dios. En medio de estos cambios es fácil abandonar el enfoque y la esencia de lo que es un verdadero adorador. La adoración genuina, esta conectada con el adorador genuino. Un adorador no es un artista y la adoración no es una presentación artística. Los verdaderos adoradores nacen en el secreto con Dios, aquel lugar donde nadie nos ve, solo Dios. El amor al talento a veces puede ser mas fuerte que el amor a su presencia. El deseo de querer ser conocido y promover la música pueden ahogar la pasión por la presencia de Dios. Dios le ha dado talentos sorprendentes a los hombres como instrumento de adoración y no como motivo de idolatría. Algunos adoran el talento y lo perfeccionan mas que su intimidad con Dios. Es tiempo que los verdaderos adoradores amemos mas el secreto con Dios, que las multitudes.
"Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren". Juan 4:23
Adoramos al Padre en Espíritu y en verdad, porque Dios es Espíritu y tales adoradores esta buscando que le adoren. Un artista es una persona que actúa ante un público en un espectáculo. En cambio, un "adorador" es uno que contempla a su Dios, le reconoce, se humilla y le exalta, estableciendo una relación íntima con él en la dimensión del espíritu. No tiene que ver con la exposición de un arte, sino con la exposición de un corazón verdadero. David era un joven que no vivió lo que nosotros hemos alcanzado en Cristo. Fui ungido como rey y el Espíritu Santo estaba sobre él, pero era un adorador que amaba la intimidad. Al tocar con sus dedos el arpa, impartía su espíritu (la unción) y su talento era el vehículo. Muchos adoradores han alternado este orden. Quieren usar una plataforma de adoración como vehículo de su talento, en vez de usar su talento como instrumento de adoración. Necesitan conocer a Dios en el secreto. El secreto es el momento diario de encuentro con Dios, con su Cristo, su reino, su Espíritu y su palabra. Es el lugar donde todo líder de adoración debe de habitar.
¿Que sucede en el secreto?
- En el secreto se cultiva la intimidad con Dios, la vida del espíritu y la verdad.
La adoración en su esencia es en espíritu y en verdad. Ministramos en la dimensión del espíritu, creamos una atmósfera espiritual para que se manifiesta una atmósfera celestial. Dios esta rodeado de adoración. El cielo está saturado de adoración porque es parte de su naturaleza. En el secreto aprendemos a amar lo que transformará los corazones; la presencia de Dios.
- En el secreto somos quebrados para reflejar su imagen.
Las plataformas de adoración deben ser dirigidas por personas que han sido quebradas en el secreto. Cuando estamos en el secreto con Dios, Cristo se hace fuerte y nosotros menguamos. Oirán la música pero no nos verán a nosotros, sino su imagen; la de Cristo. Un corazón quebrantado atrae la presencia del Omnipotente. A veces un poco de éxito ministerial levanta el orgullo, la altivez y la arrogancia. Estos son sentimientos que en el secreto se queman en la presencia de Dios. Al ser quebrantados, nos hace recordar que se trata de Él.
- En el secreto soy conocido por Dios.
De que nos valen los aplausos y el reconocimiento humano si en el cielo no soy conocido. Solo podemos llevar a las personas al lugar donde hemos estado. El mejor amigo de un adorador no es su instrumento, cualquiera que sea. El mejor amigo de un adorador debe ser el Espíritu Santo. Cuando somos conocidos por él no habrá una reunión que no lleve el sello de su presencia. Ser conocido por Dios implica intimidad continua y real con él.
- En el secreto conozco su presencia.
A los músicos le digo esto: la gente oirá tu música, pero lo que se impartirá será el contenido de tu espíritu. Conocer su presencia es el producto de una relación continua. Es muy importante, ya que nos da discernimiento para saber cuando Dios está y cuando no está en algo. Todo adorador no se debe conformar a nada más, sino a su presencia. Dios nos conoce, pero necesitamos conocerle a él en el secreto.
- En el secreto sucederán cosas que no sucederán en público
Hay cosas que van a suceder aquí que serán indescriptibles, que marcarán tu vida y cambiaran nuestra historia. Nuestros ojos se aclararan para ver y nuestros oídos para oír. Los grandes adoradores nacen en la intimidad con Dios, en el secreto de su presencia y en la comunión con el Espíritu Santo. Letras, melodías, sonidos celestiales y nuevas dimensiones en la adoración se producirán en el secreto con Dios.
- Si estoy en el secreto, la gente lo verá en lo público.
Tu victoria en público esta conectada con tu victoria en la vida secreta. Lo que ocurre en lo secreto y la intimidad con Dios, se sabrá a la hora de su exposición. La promesa dice que Dios ve en lo secreto y recompensará en lo público. Si Dios te vio en el secreto, la gente lo verá en lo público. Si Dios no te vio en el secreto, también lo verán en lo público. El secreto de tu vida pública, está en tu vida de intimidad con Dios; en el secreto.
Bendiciones
Pastor Miler Montoya
www.milermontoya.org